El número de afiliados del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) creció en agosto de manera leve, en el 0,65 %. De acuerdo con las estadísticas de la institución, ese mes se dio un incremento neto de 22 194 afiliados, al pasar de 3 413 841 afiliados en julio, a 3 436 035 en agosto. Esta es la primera vez que se revierte la tendencia a la baja desde noviembre de 2019, pues desde diciembre venían cayendo las afiliaciones.

Así lo confirmó Jorge Wated, presidente del Consejo Directivo del IESS, quien considera una buena noticia esta reversión de la tendencia. Sin embargo, reconoce que el incremento no se ha dado en el sector productivo, sino más bien en los afiliados voluntarios y sin relación de dependencia. En este grupo también están las afiliadas no remuneradas del hogar (denominadas en el IESS como afiliados semicontributivos).

Efectivamente, según los datos estadísticos del IESS hubo un incremento de 22 971 trabajadoras no remuneradas del hogar y 7967 de afiliados voluntarios, tanto en el país como en el exterior. En la Ley Humanitaria se contempla que a los afiliados voluntarios no se les cobre multa o recargo, así como se les dé facilidades de pago a aquellos que no pudieron cumplir en los meses de marzo, abril, mayo y junio.

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En cuento al incremento de las trabajadoras no remuneradas del hogar podría deberse a que un buen porcentaje de ellas son personas que perciben el bono de desarrollo humano. En estos días, el número de bonos se han incrementado. De estos, se destina un aporte mínimo que va al IESS y tienen un subsidio del Estado, dependiendo del ingreso de hogar.

En cambio, en el sector público y privado, al que pertenecen los afiliados que tienen relación de dependencia, el neto fue negativo (de julio a agosto) con 10 709 plazas de trabajo menos.

Wated espera que en los próximos meses la tendencia siga subiendo en el tema productivo, esto sería posible si, por ejemplo, ya se van a abriendo los negocios, y los diversos cantones permiten mayor actividad económica. En este sentido, anuncia que en las próximas semanas se iniciará una campaña masiva de afiliación, en la cual en ciertos casos se podrá elegir el tipo de seguro que el afiliado prefiere.

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Pese a estas cifras de crecimiento del último mes, de manera general se puede ver una caída importante de las afiliaciones que llega a 297 891 afiliados menos entre agosto de 2019 y agosto de 2020. En un año se han desafiliado 268 773 trabajadores del sector privado y 13 341 del sector público, según las cifras del IESS.

La Mesa de Estudios de la Seguridad Social ha venido advirtiendo de las dramáticas consecuencias en el fondo de pensiones de las desafiliaciones por la pandemia.

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En un informe de la Mesa se indica que la Oficina de la Organización Internacional del Trabajo para los Países Andinos presentó un informe que refleja que los efectos de la pandemia de COVID-19 ahondará la difícil situación del Seguro de Pensiones, debido a la disminución del número de años de sostenibilidad, que irían entre siete (recuperación rápida) y diez (recuperación lenta) años según la rapidez del país para recuperarse de la pandemia y suponiendo que el Gobierno pague total y oportunamente su contribución.

Por este motivo, la OIT ha manifestado que se requiere con urgencia que el Estado cumpla con la obligación de entregar el 40 % del monto de las pensiones que establece la ley. En estos días, el presidente del IESS, Jorge Wated, aseguró que existe un acuerdo entre el Ministerio de Finanzas de pagar una parte de lo que se le debe al IESS por ese 40 % (casi $1000 millones) y que podría llegar a $400 millones. (I)