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EL TOCAPU QUE NARRA EL VIAJE DEL SOL EN EL MES DE AGOSTO: LA ARQUITECTURA INCA COMO “REPRESENTACIÓN” CALENDÁRICA DEL ORDEN. UNA VISIÓN DESDE HUÁNUCO PAMPA José Luis Pino Matos EL TOCAPU QUE NARRA EL VIAJE DEL SOL EN EL MES DE AGOSTO: LA ARQUITECTURA INCA COMO “REPRESENTACIÓN” CALENDÁRICA DEL ORDEN. UNA VISIÓN DESDE HUÁNUCO PAMPA José Luis Pino Matos1 “Pues nada hay oculto que no haya de descubrirse ni secreto que no haya de conocerse y salir a la luz” Lucas, 8: 17 “Había postes de señales que no dejaba leer la nieve, ¿y quién se iaba si estaban puestos al revés?” Bertolt Brecht, La cruzada de los niños, 1939 El presente arículo propone que la existencia de algunos diseños geométricos, conocidos como tocapu, podría estar haciendo referencia a fechas importantes del calendario inca, las que se encontrarían representadas en una arquitectura planiicada y vinculada con el paisaje sacralizado de Huánuco. Las conclusiones están basadas en a) una comparación que se realiza entre los aspectos formales y los contextos del diseño de una estructura arquitectónica inca del sector Este de Huánuco Pampa; b) la forma y el contexto de un tocapu recurrente en algunos gráicos de Felipe Guaman Poma de Ayala (1987 [1615]) y Fray Marín de Murúa (2004 [1590]), asociados a iestas y rituales, y c) algunos vasos de madera o kero coloniales. La arquitectura como representación Las exploraciones para entender el signiicado del simbolismo arquitectónico vinculado con el estudio de sus contextos han demostrado ser muy frucíferas (Parker Pearson y Richards 1994: 29-30), sobre todo en los Andes, tanto para entender el Magister del Programa de Estudios Andinos de la Poniicia Universidad Católica del Perú. Correo electrónico: jose.pino@pucp.edu.pe 1 361 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto orden cosmológico expresado en centros ceremoniales arqueológicos (Isbell 1976), como para ver que la arquitectura pública se muestra relejada como un texto social (Urton 1988). Asimismo, permiten proponer que algunos siios planiicados huari poseían una coniguración calendárica y podían entenderse como mapas cosmológicos (Anders 1993) e incluso para realizar comparaciones entre arquitectura y tejidos que ayuden a entender cómo se pudo representar el Estado Huari en estos soportes materiales (Stone-Miller y McEwan 1991: 53-80). Es en esta línea y a través de sus contextos que se pretende comparar diseños arquitectónicos inca con diseños dibujados en tejidos con el in de tratar de entender qué se pretendía representar en los mismos y si estos estaban referidos a signos de igual signiicado. Los tocapu como representación del iempo y el espacio Los tocapu2 son considerados por los estudios actuales como cuadrados provistos o llenados con diseños y iguras geométricas de colores contrastantes que están presentes principalmente en texiles y en vasos de madera (Urton 2007: 247; Grube y Arellano 2002: 52; Arellano 1999: 253). Los texiles donde se aprecian estos signos son generalmente uncu o túnicas reales (Rowe 1979, Szemiński 2009: 378). Posiblemente los signos y ciertos mensajes presentes en estas túnicas eran suscepibles de ser apreciados por un público que veía a los mismos personajes reales vesidos con estas prendas (Arellano 1999: 257). ¿Qué representaban estos diseños geométricos? Algunos estudios plantean el signiicado del tocapu como un ipo de heráldica incaica (Eeckhout y Danis 2004). Sin embargo, según Mariusz Ziółkowski, Jarosław Arabas y Jan Szemiński, esta opinión general que considera que los tocapu fueron “un ipo de signos heráldicos” prevalece en varios autores, pero aún sin que se precise concretamente qué se eniende bajo esta deinición tan general (Ziółkowski et al. 2008: 152). Otros estudios reieren que posiblemente algunos tocapu sean emblemas de las provincias inca (Julien 1999: 89). Algunos tocapu que posiblemente se referían a lugares y provincias súbditas, otorgaban legiimación a las autoridades de estas provincias al exhibirlos en actos públicos (Grube y Arellano 2002: 57-60). Asimismo, Cummins (2004) plantea la posibilidad de que a través de ellos se expresaran conceptos abstractos, cuyo signiicado simbólico debería entenderse de forma contextual. De este modo, las divisiones y composiciones en los tocapu, ya sean biparitas o cuatriparitas, podrían tener paralelos conceptuales en las formas políicas y sociales incaicas, tales como 2 Según Rodolfo Cerrón-Palomino (2008: 99-109), tocapu es un vocablo aimara quechuizado y luego castellanizado como un tecnicismo referido a la decoración de los tejidos, pero su signiicación parte del verbo almacenar. 362 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus hanan y rurin3 o el Tawaninsuyu (Cummins 2004: 140). De esta manera, se habría representado a los territorios incorporados con diseños visuales presentes en tejidos y vasos usados en actos públicos (Ziółkowski et al. 2008: 158). Igualmente, estos diseños podían representar alianzas políicas y manifestarse esto no solo en los uncu, sino también en lugares asociados con ancestros, como las chullpa, en el caso del aliplano sur. Las iguras geométricas, al estar pintadas en los cuatro lados de las chullpa, conformarían un tocapu tridimensional que evocaría determinadas narraivas locales de la ideología inca imperial (Cummins 2007: 285). Del mismo modo, los diseños escalonados que se observan en las túnicas incas han sido plasmados con pigmento rojo en la arquitectura de piedra trabajada en el templo principal del siio inca de Cacha/Raqchi (Sillar y Dean 2002: 248). En la arquitectura de barro en la costa, el uso de ciertos colores en el siio inca de Tambo Colorado expresaba posiblemente jerarquías sociales en espacios rituales importantes (Protzen y Morris 2004: 273-275). Estas descripciones corresponderían a una de las formas cómo, mediante diseños y tocapu, se plasmaron conceptos e idenidades en la arquitectura. Para el caso de los tocapu de forma calendárica, un caso muy interesante que vale la pena resaltar es el de un manto (con código MFA325 de la colección del Boston Museum of Fine Arts) que representaría mediante 1824 diseños geométricos un calendario mulianual y conmemoraivo para la cuenta de cinco años (Urton 2007), en el que los diseños sobre el soporte texil marcarían el iempo y los colores dividirían el espacio en formas opuestas y simétricas. Sin embargo, aún nos falta tener más información sobre los contextos de los casos arriba mencionados, lo que nos ayudaría a acercarnos más al entendimiento de estos diseños geométricos y de sus representaciones. El diseño cuatriparito de una estructura arquitectónica en Huánuco Pampa Huánuco Pampa fue una de las capitales provinciales más importantes de la región del Chinchaysuyu en la época inca. La planiicación del espacio y la arquitectura de este asentamiento no solo relejó su organización radial, sino también enfaizó muchas subdivisiones espaciales de formas duales, triparitas y cuatriparitas (Morris 1987; Arellano 1998; Pino 2004a, 2005). Sin duda, este asentamiento, en su conjunto, relejó los principales aspectos de la idiosincrasia y la cosmovisión inca al codiicar en la arquitectura pública los procedimientos de las actuaciones sociales y políicas, sobre todo en sus acividades oiciales (Morris 1995: 422-423). 3 Preferí escribir la palabra quechua rurin, con r, porque esta es la manera empleada en el área del Chinchaysuyu (Cerrón-Palomino 2008: 235), en la que se localiza Huánuco Pampa. 363 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto Sin embargo, entre todas las estructuras arquitectónicas presentes en el asentamiento, hay una que llamó la atención del autor por su diseño paricular. Esta construcción se encuentra en el sector Este del complejo arqueológico, especíicamente en el subsector IIB, y es denominada la Casa del Inca o Incawasi, según la sectorización de Morris y Thompson (1970, 1985). Asimismo, ha sido caliicada como parte de un área palaciega o de alojamiento real del sector IIB4 (Morris 2004: 304), el cual presenta un eje solar o equinoccial (Morris 1987: 34). Este sector de Huánuco Pampa también ha sido asociado con el culto al dios Huiracocha (Morris 1987: 42; ver Figura 1). Figura 1 - Fotograía de la cara Este de la estructura dual y cuatriparita del sector IIB de Huánuco Pampa (foto del autor). Esta construcción es de piedra trabajada y pulida al esilo cuzqueño. Sus coordenadas son las siguientes: laitud 09°52’31’’S, longitud 076°48’43’’W, y una alitud de 3644 msnm. Se trata de una estructura doble, de planta rectangular (de 9 x 23 m), compuesta por dos partes iguales (norte y sur) divididas por un corredor central que las atraviesa en un senido SW-NE. Cada parte de la estructura está dividida, a su vez, en dos recintos por un muro medianero (ver Figura 2). La mencionada construcción posee un corredor central (CC) y cuatro recintos: - dos recintos hacia el Este: el recinto noreste (RNE) y el recinto sureste (RSE), - dos recintos hacia el Oeste: el recinto noroeste (RNW) y el recinto suroeste (RSW). Cada recinto posee accesos de forma trapezoidal hacia los lados este y oeste, con medidas promedio de 1.20 m de base, 2.35 m de altura y 1.05 m de ancho en el umbral. En el interior de los muros de cada recinto se encuentran trece nichos trapezoidales, a una altura de 1.90 m desde el nivel del suelo. Las medidas promedio de cada nicho son de 50 cm de base, 50 cm de altura y 35 cm de profundidad. Además de su diseño dual y cuatriparito, la singularidad de esta construcción se halla en las caracterísicas internas de cada recinto y de su corredor central, que son como siguen: 364 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus Figura 2 - Plano de la estructura dual y cuatriparita del sector IIB de Huánuco Pampa. Niveles En un nivel alto se encuentran los recintos noroeste (RNW) y suroeste (RSW). En un nivel intermedio se encuentra el corredor central (CC). En un nivel bajo se encuentran los recintos noreste (RNE) y sureste (RSE). Los recintos cuyos accesos se orientan hacia el Este están en un nivel inferior con respecto al corredor central y los recintos cuyos accesos se orientan hacia el Oeste 365 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto están en un nivel muy superior a todos los demás. El corredor central está a una altura intermedia entre los lados este y oeste y dispone de un paso de escalón tanto para subir al lado oeste como para bajar al lado este. Muros Las hiladas internas de los cuatro muros, tanto del recinto noreste (RNE) como del suroeste (RSW), están construidas de forma independiente y superpuesta. Las hiladas internas de los cuatro muros del recinto sureste (RSE) están construidas de forma conjunta, pero desde el piso o desde el umbral hacia arriba se conforma una sola hilada que recorre los cuatro lados del recinto de forma espiral en senido horario. Esta hilada empieza su ascenso en el lado norte del recinto. Las hiladas internas de los cuatro muros del recinto noroeste (RNW) están construidas de forma conjunta, pero desde el piso o desde el umbral hacia abajo se conforma una sola hilada que recorre los cuatro lados del recinto de forma espiral en senido anihorario. Esta hilada empieza su descenso en el lado sur del recinto (ver Figura 3). Accesos Los accesos trapezoidales de los recintos son de una sola jamba. El acceso trapezoidal del corredor central (CC) es de doble jamba. Orientación en relación con el paisaje Tanto el corredor central como los accesos del lado este se orientan directamente y con mucha precisión en el horizonte este hacia una roca de forma alargada, la cual sobresale notablemente por tener una forma muy verical y por estar visualmente en medio de una quebrada. La roca es conocida como Chaupijirca (<Chaupi-Jirca>) y la quebrada se denomina Pishtajwain (ver Figura 4). Orientaciones astronómicas Los ejes del corredor central están orientados a 80°05´39´´ de azimut hacia el lado de la salida del sol y 260°05´39´´ hacia el lado de la puesta del sol, es decir 10° hacia el Norte desde el Este (90°) o 10° hacia el Sur desde el Oeste (270°), lo cual corresponde a las posiciones de puesta del sol cuando pasa por el cenit (PSPZ: 24 de febrero y 19 de octubre) y a las posiciones de salida del sol cuando pasa por el nadir o anicenit (SSPAZ: 16 de abril y 28 de agosto). Más detalles sobre los alineamientos astronómicos de esta construcción ya fueron presentados en publicaciones anteriores (Pino 2004b, 2005). 366 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus Figura 3 - Descenso de las hiladas de piedra del muro sur del recinto noroeste a parir del umbral (foto del autor). Figura 4 - Fotograía del corredor central orientado hacia la roca Chaupijirca y la quebrada Pishtajwain (foto del autor). Simetría, coniguración espacial y arquitectónica de la construcción cuatriparita Podemos iniciar el análisis de la coniguración espacial de esta construcción indicando que la unidad mínima sería el recinto con su respecivo acceso. Este recinto o unidad presenta cuatro réplicas. La primera de ellas se forma realizando una relexión especular del recinto, en la que se toma como eje a la parte posterior del recinto que está opuesta al acceso. Así, se forma un par de recintos unidos por sus espaldas y sus accesos. Uno de ellos mira hacia el Este y el otro hacia el Oeste, de forma simétrica. Este par de recintos es replicado y ubicado uilizando el muro de unión de los recintos como el mismo eje. Pero, ambos están separados por un espacio que 367 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto sería el corredor central y iene un par de recintos al lado norte y otro al lado sur. Los recintos se ubican hacia el Noroeste (RNW), Noreste (RNE), Suroeste (RSW) y Sureste (RSE), también de forma simétrica. Hasta aquí podemos airmar que se produce una relexión de pares de recintos (ver Figura 5). Esta coniguración releja de manera preliminar las ideas de dualidad y complementariedad de lo alto y lo bajo o lo de adentro, lo que en palabras quechuas se describe como hanan/rurin o hanan/uku (Cerrón-Palomino 2008: 235, Arellano 1998). Esta coniguración se complica, pues las caracterísicas arquitectónicas internas del recinto sureste (RSE) se replican en el recinto noroeste (RNW), pero de forma inversa, ya que las hiladas de sus muros internos, que en el recinto este siguen de manera ascendente en senido horario, en el recinto oeste siguen de forma descendente en senido anihorario, con lo cual la cuatriparición de este recinto adquiere una modalidad de doble relexión especular. La abstracción de esta coniguración espacial y su mismo diseño es muy similar a los diseños representados en la cerámica diaguitainca, en los cuales también se presenta la doble relexión especular (González 1998, 2008, y en este volumen). Esta cuatriparición, que muestra una doble relexión especular de los pares de recintos simétricos, es concordante con la abstracción del concepto yananin, descrito por Tristan Plat (1980), por lo que considero que este concepto está plasmado en la construcción arquitectónica. De esta manera, podría tratarse de la abstracción de un tocapu, representada de forma tridimensional. El contexto de la construcción arquitectónica cuatriparita de Huánuco Pampa Esta construcción forma parte del conjunto arquitectónico amurallado más importante de Huánuco Pampa, ubicado en el sector este del complejo. Posiblemente tenía una función religiosa y palaciega. Como ya se ha indicado, esta zona se encontraba amurallada y contaba con un solo acceso general, lo que indica que era restringida. Para llegar hasta la construcción cuatriparita, se paría desde una plataforma ushnu en medio de la plaza y seguidamente se tenían que atravesar tres pares de portadas y dos paios grandes (ver Figura 6). Las portadas se situaban de forma consecuiva en una misma línea este-oeste o eje equinoccial, pero con la paricularidad de que cada portada desviaba su orientación de forma individual unos 10° grados hacia el noreste, hasta cruzar el úlimo par de portadas y llegar a la construcción cuatriparita, cuya orientación principal también diiere unos 10° grados hacia el noreste, lo cual indica principalmente el eje de las posiciones del sol cuando pasa por el cenit y anicenit (Aveni 2002: 265). La orientación del corredor central (CC) y los accesos de cada recinto, permite ver las 368 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus puestas del sol a su paso por el cenit (en Huánuco Pampa, con casi 10° de laitud sur, esto sucede los días 24 de febrero y 19 de octubre), así como las salidas del sol cuando pasan por el nadir o anicenit (16 de abril y 28 de agosto). Figura 5 a: Esquema y descripción de las caracterísicas arquitectónicas de cada recinto de la construcción cuatriparita de Huánuco Pampa; b: Esquema síntesis de las oposiciones binarias presentes en la misma construcción. Figura 6 - Fotograía de portada que se replica en pares, en el sector IIB de Huánuco Pampa (foto del autor). Vale la pena destacar la orientación enfáica del ediicio hacia la salida del sol del día 28 de agosto, casi a inales del mes, en el que el astro sale en medio de la roca verical denominada Chaupijirca. Esta roca es el punto hacia donde se orientan directamente el corredor central y los accesos de la construcción cuatriparita del lado este. Según 369 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto el quechua local, chaupi se reiere a “mitad” o “medio” y jirca a “sagrado” o “cerro”, por lo que se traduce como el medio sagrado o el cerro del medio, aunque en realidad no se trata de un cerro, sino de una roca que destaca notablemente por su gran tamaño y vericalidad en el paisaje del horizonte este (ver Figura 7). Figura 7 - Roca de forma alargada conocida como Chaupijirca en la quebrada Pishtajwain (foto del autor). Las personas de la comunidad local aún consideran a esta roca como sagrada y peligrosa. Además, desde Huánuco Pampa hay una ruta que se dirige hacia ella. Se trata de un camino inca empedrado y con escalinatas para ascender hasta su parte posterior. Ahí se encuentra un llano en el que están colocadas cuatro shayhua4 de ierra (o cuatro mojones agrupados), cada una de más de dos metros de alto, colocadas un par frente al otro. Estos mojones corresponden con el punto de conluencia de los territorios de cuatro comunidades campesinas (Obas, Cosma, Rondos y Sillapata) y con el cruce de los cuatro caminos que conducen a cada una de estas cuatro comunidades (ver Figura 8). Fijar ciertas fechas con la orientación del corredor central hacia la roca en el horizonte debió haber sido algo muy importante. Este eje de orientación que indicaba las posiciones del paso del sol por el cenit y el anicenit debió ser muy seguro para el conteo de días. Se ijaba la posición en el horizonte del orto y del ocaso del sol a su paso por el cenit (que va de acuerdo con la laitud del siio, como ya lo hemos mencionado) y se ceriicaba que se tratase de esos días mediante la observación de construcciones que servían como gnomones o viceversa. Las posiciones del sol Shayhua es una palabra quechua, en su versión local huanuqueña, que proviene de la palabra sayhua (saywa), del quechua sureño, y que se reiere a un “marcador o mojón que marca un límite”. 4 370 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus en el nadir estarían ijadas por oposición a las del cenit (a 180°), tal como lo propuso Zuidema (1981: 324). En otras palabras, al tomar la posición de salida del sol en el cenit se invierte esta dirección y se obiene la posición del ocaso del sol en el anicenit. De la misma manera, al ubicar la posición de la puesta del sol en el cenit, se invierte la dirección y se obiene la posición de orto del sol en el nadir. Además, alrededor de las fechas del nadir del sol, la luna llena en las noches pasa cerca del cenit. Pero sin duda, la salida del sol en la fecha en que pasaba por el nadir (en agosto) fue la más importante, sobre todo para dar inicio al año agrícola. Figura 8 - . Las cuatro shayhuas o mojones de ierra donde conluyen los territorios de las comunidades de Obas, Cosma, Rondos y Sillapata, al este de Huánuco Pampa (foto del autor). En el Cuzco, en el mismo Coricancha, también se pueden observar estructuras duales de diseño y caracterísicas similares, con este ipo de corredor de doble jamba, con posibles relaciones astronómicas (Bauer y Dearborn 1998: 165-168). Asimismo, el siio Cacha/Raqchi presenta seis pares de este ipo de construcciones arquitectónicas, según se observa en su plano (Sillar y Dean 2002: 228). Del mismo modo, en el sector II del siio Incawasi de Huaytara, en Huancavelica, se aprecia esa construcción dual y cuatriparita, con un corredor central que divide los pares de recintos, pero que conforman una sola unidad arquitectónica (Serrudo 2010: 74-81). Estudios sobre estructuras duales con formas semejantes a las de Huánuco Pampa presentes en el siio de Ingapirca en Ecuador han demostrado que un corredor principal (Corredor I) estaba orientado hacia la puesta del sol para el 4 de agosto y asociado también con una plaza ceremonial (Ziółkowski y Sadowski 1989: 155-156, 159; 1992: 56-59). La importancia de agosto para los incas El mes de agosto era considerado muy importante para la sociedad inca, sobre todo en las capitales provinciales. Según revelan algunos cronistas, a ines de este mes eran iniciadas las acividades de siembra, viéndose acompañadas por la realización de sacriicios. 371 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto Y solamente pondré la iesta de Hatun Layme5 porque es muy nonbrada y en muchas provinçias se guardava y era la prençipal de todo el año y en que mas los Yngas se regozijavan y más sacriiçios se hazían. Y esta iesta se selebrava por in de agosto, quando ya ellos avían cogido sus mayzes, papas quinua, oca y las demás semillas siembran (Cieza de León 1986 [1553]: 90 [38]; el resaltado es nuestro). Agosto tenía una trascendencia imperial, pues en este mes se realizaba la iesta de la Citua, con muchos sacriicios que se replicaban en cada provincia, según reiere Cristóbal de Molina. Fue el inuentor desta iesta, Ynca Yupanqui, para que se hiziese por la horden dicha porque no obstante que de antes la hacían, desde que hubo yncas no la hacían por esta horden. Y lo que restava deste mes lo gastavan en lo que les parecía y convenía. Asimismo, en todas las caveças de provincias, hacían la dicha iesta o pascua llamada Citua todos los yngas governadores; y de su generación, onde quiera que se allavan, y por el dicho iempo, aunque en la solenidad y sacriicios hera mucho menos, pero no porque dejasen de hacer ninguna de las cerimonias (Molina 1989 [1575]: 96; el resaltado es nuestro). Al parecer, la Citua era una fesividad en la que había una fuerte movilización e interacción de las provincias, tanto es así que desde los lugares más alejados se desplazaban hacia el Cuzco los ídolos y las iguras de las deidades principales de todo el imperio: “Al mes de Agosto llamaban Coyaraymi, y en este mes hacían la Citua, y para hacer la dicha iesta trayan las iguras de las huacas de toda la ierra de Quito a Chile, las quales ponían en sus casas que en el Cuzco tenían para el efecto que aquí diremos después” (Molina 1989 [1575]: 73: el resaltado es nuestro). En el Cuzco, la fecha para empezar a sembrar también era en agosto, tal como indica el cronista anónimo. Y entrando el Sol por los dos pilares de en medio, era el punto y el iempo general de sembrar en el Cuzco, y era siempre por el mes de Agosto. Es ansi, que, para tomar el punto del Sol, entre los dos pilares de en medio tenían otro pilar en medio de la plaça, pilar de piedra muy labrada, de vn estado en alto, en vn paraje señalado al propósito, que le nombraban Osno, y desde allí tomauan el punto del Sol en medio de los dos pilares, y estando ajustado, hera el iempo general de sembrar en los valles del Cuzco y su comarca (Anónimo 1906 [ca. 1565]: 151; el resaltado es nuestro). Además, en el caso del maíz, la siembra tenía que ser muy precisa y sus marcadores astronómicos bien deinidos. Así lo menciona Felipe Guaman Poma cuando hace referencia a agosto en una parte de su crónica. Según Mariuz Ziólkowski (1989: 154), el nombre de la iesta Hatun Raimi es una interpretación de la palabra atrinlaisme que esta anotada originalmente en el manuscrito del Escorial. 5 372 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus Agosto, Chacra Iapvi Qvilla: Este mes an de arrar y senbrar mays y de temprana de trigo y se a de senbrar el mays tenprana que llaman michica zara; mauay papa, chaucha papa. […] Y ci hierra un mes una semana o un día del ruedo y rreloxo que lo ven los viejos, se daña el mays. Quiere entrar en el punto conquauidad del sol y ayre del cielo la comida. Y ací quiere Dios que entre el mays en su iempo (Guaman Poma 1987 [1615]: 1227 [1152 [1162]]; el resaltado es nuestro). Según las citas expuestas, considero que la orientación principal de la construcción cuatriparita hacia la salida del sol en agosto estaba relacionada justamente con el inicio de las acividades y los rituales vinculados a la siembra, los que debieron haber sido muy importantes en Huánuco Pampa, al ser enfaizados de esa manera a través de la arquitectura. Agosto y el tocapu que muestran Felipe Guaman Poma y Fray Marín de Murúa En varios gráicos de la Nueva Coronica de Felipe Guaman Poma de Ayala existen unos diseños geométricos que usan los personajes de élite en sus túnicas, que fueron ideniicados y relacionados con el mes de agosto por Tom Zuidema (1991, 2011). Los dos gráicos que presenta Felipe Guaman Poma sobre las acividades del mes de agosto, además de mostrar personajes de la nobleza inca rompiendo la ierra con chaquitaclla, muestran un diseño geométrico en la túnica del personaje masculino principal. El primer dibujo que alude a agosto se encuentra en el capítulo de los años y meses de los incas. En este dibujo, Guaman Poma presenta un grupo de cuatro varones rompiendo la ierra con una chaquitaclla y cuatro mujeres que ayudan en esta labor, con una mujer jorobada sirviendo bebida en dos vasos. En la parte superior izquierda del dibujo se aprecia al sol con rostro humano pero con los ojos cerrados; hacia el lado derecho, se observa la luna, también con rostro humano y con los ojos cerrados. Al pie de la cita se indica “iempo de labranza” (Guaman Poma 1987 [1615]: 243 [250 [252]]). Sin embargo, algo que no pasa desapercibido en el gráico es el tocapu o diseño geométrico presente en la túnica del personaje real, que consiste de un rectángulo subdivido en dos rectángulos interiores, cada uno de estos, a su vez, está subdividido en dos cuadrados, diseño presente tanto hacia la parte delantera de la túnica como hacia la espalda (ver Figura 9). El segundo dibujo que se reiere a agosto se encuentra en el capítulo de los meses y años. En este dibujo, Guaman Poma presenta a cuatro varones y cuatro mujeres, cuatro pares en la labor de abrir la ierra con la chaquitaclla, pero con la diferencia de que en este dibujo se observan los cerros y solo está presente el sol con rostro humano y los ojos abiertos. Las cuatro parejas están cantando y una de las mujeres se encuentra sirviendo una bebida en dos vasos (Guaman Poma 1987 [1615]: 1229 [1153 [1163]]). Por su parte, el personaje principal masculino está vesido con una túnica con el mismo diseño tocapu cuatriparito ya descrito líneas arriba (ver Figura 10). 373 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto Figura 9 - Primera imagen del mes de agosto, según Guaman Poma [1615: 250 [252]]. Figura 10 - Segunda imagen del mes de agosto, según Guaman Poma [1615: 1153 [1163]]. El gráico está precedido de una descripción de las acividades del mes, referidas de la siguiente manera: Agosto, Chacra Yapuy Quilla [mes de romper ierras]: Que este mes entran a trauajar; aran y rronpen ierras cimple para senbrar mays. En este mes sacriicauan en los ýdolos, uacas, pobres deste rreyno con lo que podían, con cuies [conejo de Indias] y mullo [conchas] y zanco y chicha y carneros. Algunos ofrecían en cada pueblo a sus ýdolos con sus hijos o hijas, questo cada uno no más daua en un año y lo daua a quien le uenía de dalle el hijo a la guaca y se lo enterrauan bibo; el quien lo daua su hijo yua llorando. Esto tenía en todo el rreyno. En este mes haze haylle [cantos de triunfo] y mucha iesta de la labransa el Ynga y en todo el rreyno y beuen en la minga [prestación coleciva de trabajo a una autoridad] y comen y cantan haylli y aymaran [canto al romper la ierra], cada uno su natural hayli. Y se conbidan; comen y beuen en lugar de paga. Y comiensan a senbrar el mays hasta el mes de enero, conforme el rrelojo y rruedo del sol y del temple de la ierra; ci es yunga [zona andina cálida], tarde, ci es cierra, tenprano, como conbiene en este mes. Ay gran falta de yuyos y mucha carne y poca fruta. (Guaman Poma 1987 [1615]: 242 [251[253]]; el resaltado es nuestro). Según lo citado, en este mes se realizaba no solo la siembra del maíz sino también ciertas acividades rituales, y sacriicios a las huacas o deidades locales,6 para los En la época inca, muchas de las deidades o huacas eran aspectos notables de la naturaleza y del paisaje, como rocas, mananiales, lagunas, entre otros. 6 374 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus que se tenía en cuenta la observación astronómica. En esta cita, Guaman Poma describe explícitamente que en agosto se hacían las ceremonias de Capacocha, las que consisían en sacriicios humanos en los que se enterraban niños. Vale la pena indicar que el diseño cuadrangular cuatriparito también está presente en otros gráicos de este autor, como en el que muestra de cuerpo entero al cuarto Inca, Mayta Capac Inga, vesido con una túnica en la que se aprecia este tocapu cuatriparito, denominado como caxane o casana (Guaman Poma 1987 [1615]: 93 [98]), seguido de una descripción de la túnica que indica: “[…] y su manta de encarnado y de su camexeta de hazia arriua azul y del medio tres betas de tocapo y de auajo caxane con blanco y uerde y colorado y quatro ataderos de los pies” (Guaman Poma 1987 [1615]: 93 [99]). Fray Marín de Murúa es el otro autor que presenta este diseño rectangular cuatriparito en sus gráicos, principalmente en dos dibujos. El primero de ellos es un dibujo del inca Mayta Capac, vesido con una túnica con el diseño cuatriparito en su parte inferior (Murúa 2004 [1590]: 28v.). Según Murúa, este inca habría tenido por residencia el Coricancha (Murúa 2001 [1615]: 53-54), ver Figura 11. En otra parte del mismo documento, se presenta un gráico en el que aparece el inca Capac Yupanqui con una mujer realizando un ritual al pie de una roca o cerro de forma muy verical sobre el que aparece el sol con rostro humano (Murúa 2004 [1590]: 96v.). El inca está arrodillado, sosteniendo a un niño de corta edad, el cual es ofrecido a la roca y al sol. El personaje femenino también está en cuclillas y sirviendo una bebida en dos vasos. El inca Capac Yupanqui lleva en su túnica el diseño rectangular cuatriparito en fondo blanco y con cuadrados amarillos (ver Figura 12). En el folio adjunto hay una descripción que lleva por ítulo Del modo y manera que hacía el Inga sacriicio al Sol y como Capac Yupangui fue el que hizo el templo Quisuar Cancha Pachayachachic. En esta descripción se relata cómo el inca realizaba las capacocha o sacriicios humanos para el sol en la Casa del Sol (Coricancha), en el Cuzco, y para las “guacas” en cada provincia. Sin embargo, Murúa indica al inal que el Pachayachachic era la deidad que tenía más poder que el sol, por ello, este inca le construyó su templo llamado Quisuarcancha.7 Este dato va de la mano con el dibujo, pues ahí la roca hacia la cual dirige su mirada el inca lleva escrito cerca de su cumbre el nombre de Pachayachachic, con el dibujo del sol sobre la roca (Murúa 2004 [1590]: 178-179 [Cap. XXXIV, 96r.]). En el templo del Quisuarcancha, según otros autores, también se sacriicaban niños y se encontraba el ídolo del dios Viracocha (Bauer 2008: 261-262). 7 375 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto Figura 11 - El Inca Mayta, según Marín de Murúa [1590: 28v.]. Figura 12 - El Inca Capac Yupanqui realizando ofrendas al Sol sobre una roca según Murúa [1590: 96v.]. Un úlimo gráico de Murúa en el que está presente el diseño cuadrangular cuatriparito es el de la transmisión de mando de Pachacutec a Tupac Yupanqui, o la abdicación del emperador en favor de su hijo (ver Figura 13; Murúa 2004 [1590]: 28v.). Figura 13 - La abdicación de Inca Yupanqui a favor de Tupac Yupanqui, según Murúa [1590: 44v.]. 376 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus El tocapu casana en los dibujos de Felipe Guaman Poma Como ya se ha indicado, el diseño cuadrangular cuatriparito de las túnicas masculinas relacionadas con las acividades del mes de agosto es conocido como casana. Este es uno de los pocos diseños cuyo nombre indígena ha prevalecido hasta la actualidad, gracias a Guaman Poma (Frame et al. 2004: 832), quien lo escribió como caxane, lo cual correspondería con un patrón de túnica estandarizada con asociación contextual arqueológica (Rowe 1979: 261, Frame et al. 2004: 833). Este diseño está presente en varios dibujos de la Nueva Coronica de Guaman Poma (Rowe 1979: 261; Guaman Poma 1987 [1615]: fols. 98, 149, 157, 194 [196], 250 [252], 252 [254], 256 [258], 277 [279], 281 [283], 344 [346], 352 [354] y 1153 [1163]). Según observa Tom Zuidema en los dibujos de Guaman Poma, el inca Mayta Capac está vesido con la túnica que lleva el tocapu casana. Como este diseño está relacionado con las acciones de arar o abrir la ierra, el autor plantea que los rituales correspondientes a estas acividades agrícolas, desarrolladas en agosto, estaban a cargo de la Usca Mayta panaca, o familia real de Mayta Capac (Zuidema 1991: 170-171; 2011: 687). En un contexto calendárico, la túnica con el tocapu casana era usada por personajes reales en agosto y sepiembre, por lo que este diseño pudo haberse referido al inicio de la temporada agrícola (Zuidema 2011: 689). Este tocapu casana, presente en la obra de Guaman Poma, ha sido catalogado como un moivo decoraivo con el código M1 y sus variantes M1a, M1b y M1c, posiblemente inspirado en texiles reales (Eeckhout y Danis 2004: 309). Además, es importante notar que Guaman Poma dibuja de forma muy clara a dos personajes con cargos administraivos con la túnica del casana. Uno de ellos es el alguacil mayor (Guaman Poma 1987 [1615]: 348 [344 [346]]), sobre el que indica que también podría ser de la zona de Huánuco. A este oicio no le elexía a yndio pobre, cino a hijos uastardos o sobrinos de los Yngas. Ya que le elexía este dicho cargo y oicio a iel yndio Hanan Cuzco o Lorin Cuzco ynga, Anta ynga, Quillis Cachi ynga o a los hijos de los prencipales de la parcialidad de Guanoco y no a otro nenguno. Y ací porque fueron grandes seruidores de la corona rreal del Ynga los yndios Guanocos, ieles como en Casilla los biscaynos, ací les dio muchas ierras y muchos pueblos en este rreyno. A los yndios Guanocos, Chinchay Suyos sugeto de capac apo Guaman Chaua, Yaro Bilca, Allauca Guanoco, y a sus hijos le dieron muchos cargos y oicios, beneicios en todo este rreyno (Guaman Poma 1987 [1615]: 348 [345 [347]]; el resaltado es nuestro; ver Figura 14) El otro personaje aparece en el gráico de los amojonadores, que son los que marcaban los límites territoriales o fronteras. Uno de ellos viste la túnica casana. En el gráico dice “AMOJONADORES DESTE REINO, VNA CAVCHO INGA, CONA RAQVI 377 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto INGA / mojonador y mededor” (Guaman Poma 1987 [1615]: 356 [352 [354]]). Al respecto, Guaman Poma añade lo siguiente: Los dichos amojonadores lo amojonaron por mandado de Topa Ynga Yupanqui cada prouincia destos rreynos y cada pueblo de cada ayllo. Aunque fuese dos yndios, aunque fuese uno solo, aunque fuese a una yndia o niño, les rreparía sementeras chacaras y pastos y secyas, agua para rregar sus chacaras, ací de la montaña como de la cierra y yungas con sus acecyas de rriego y rríos, leña, paxa, con mucha horden y concierto cin agrauiar a nadie, sacando para el sol y luna, estrellas y tenplos y guacas dioses y para el Ynga y coya [reina], auquicona, nustaconas y para los señores grandes capac apo y para los apocona, curacaconas; allicac camachicoccunas, conforme la calidad y para los yndios de guerra, auca camayoc y capitanes, cinchicona, y para los biejos y biejas, enfermos y solteros y solteras, muchachos y muchachas, niños y niñas, que todos comían cin tocar a las chacaras de la comunidad y sapci y lucri que an tenido (Guaman Poma 1987 [1615]: 356 [353 [355]]; el resaltado es nuestro; ver Figura 15). Figura 14 - El alguacil mayor, según Guaman Poma (1987: 348 [1615: 345 [347]]). Figura 15 - Los amojonadores en el Tawaninsuyu, según Guaman Poma [1615: 353 [355]]. Es interesante constatar la presencia de este tocapu en personajes que han desempeñado cargos en las provincias, cargos que aluden a poner “orden social y territorial”, lo cual podría también ser uno de los signiicados de este diseño cuatriparito. Al respecto, se ha propuesto que cada cuadrado del diseño casana estaría representando cada uno de los cuatro suyu o divisiones espaciales del Tawaninsuyu, que vendría a ser las cuatro partes unidas como una sola (Frame 2007: 378 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus 18, 23). Por ello, considero que esta abstracción también relejaría el orden ideal cuatriparito en la época inca. Mary Frame también asocia este diseño con la guerra, pues, en ciertos pasajes, algunos guerreros llevan el casana (Frame et al. 2004), lo que sugeriría la idea de la guerra y las conquistas como la lucha e imposición de un orden. El casana como arquitectura El nombre casana no solo correspondía a un tocapu, sino también estaba referido a un importante conjunto arquitectónico del Cuzco. El casana fue posiblemente el palacio mejor construido al borde de la plaza central del Cusco, por lo que llamó la atención de Francisco Pizarro y este lo pidió como recompensa al dividirse la ciudad entre los españoles (Bauer 2008: 227). Sin duda, este ediicio debió llamar la atención por su ino acabado y su gran tamaño. La otra casa real que estaba al poniente de Coracora se llamaba Casana, que quiere decir “cosa para helar”. Pusiéronle este nombre por admiración, dando a entender que tenía grandes y hermosos ediicios que habían de helar y pasmar al que los mirase con atención. […] De la que llamaban Casana alcancé mucha parte de las paredes, que eran de cantería ricamente labrada, que mostraban haber sido aposentos reales. Y un hermosísimo galpón que en iempo de los incas, en días lluviosos, servía de plaza para sus iestas y bailes (Garcilaso de la Vega 1991 [1609] lib.7, cap. X: 441-442, el resaltado es nuestro). El Inca Huaina Capac fue quien mandó a construir este palacio. Antes de viajar, Dejó en esta ocasión por gobernador en el Cuzco a un hermano suyo, bastardo, llamado Sinchiroca, el cual era hombre de gran ingenio e industria en ediicios y arquitectura; a éste mandó que hiciese su casa en Cassana porque antes era en Uchullo y que fuesen hechas con grandísima majestad y gasto, que lo que al presente es la Iglesia Mayor en el Cuzco, era un buhío muy grande, que servía cuando estaban en la plaza y venía algún aguacero grande para recogerse dentro de él a beber, y también era como despensa donde los Collas, que era la gente a quien tocaba y pertenecía esto por mandado del Ynga, daban ración de carne a los que él ordenaba. Este Sinchiroca hizo todos los ediicios famosos que hay en Yucay, todo para Huayna Capac, en que se ocuparon mucha mulitud de indios (Murúa 2001 [1615], vol. 1, cap. XXX 98; el resaltado es nuestro). Como se mencionó en la cita precedente, el personaje encargado de construir el casana se llamaba Sinchi Roca. Esto también es mencionado en otras citas: Y mientras fue a hacer esta jornada, dejó por gobernador del Cuzco a un hermano bastardo llamado Cinchi Roca, hombre ingenioso en ediicar. Y así éste hizo todos los ediicios de Yucay y las casas del inga en Caxana, en la ciudad del Cuzco. Y hizo 379 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto después el mesmo Guaina Capac otros ediicios a la redonda del Cuzco, en las partes que le pareció más acomodadas (Sarmiento 1943 [1572], cap. 58: 239; el resaltado es nuestro). Bernabé Cobo corrobora esta versión cuando relata lo siguiente: “Había su hermano Apu Cinchi-Roca durante su ausencia ediicádole el palacio llamado Casana, de obra costosa, de que se holgó tanto el rey, que se quiso aposentar luego en él” (Cobo 1956 [1653], vol. XII, cap. XVI: 207; el resaltado es nuestro). Cobo también reiere que el casana le pertenecía al inca Huayna Capac y sus partes eran lugares sagrados o huacas, por lo que están incluidas en la relación de los adoratorios del Cuzco. [Ch. 6:4] la quarta Guaca tenia por nombre, Guayra y estaua en la puerta de Cajana; en ella se hacía sacriicio al viento para que no hiciese daño y estaua hecho un hoyo, en que se enterrauan sacriicios” (Cobo 2003 [1653]: 197 [228]; el resaltado es nuestro). [Ch. 6:5] la quinta Guaca era el palacio de Huayna Capac llamado Cajana; dentro del cual hauia una laguna nombrada, Ticcicocha, que era adoratorio principal, y a donde se hacían grandes sacriicios” (Cobo 2003 [1653]: 197 [228]; el resaltado es nuestro). Cobo también indica que, al morir Huaina Capac, “enterraron en Quito el corazón de Guayna Capac, y su cuerpo llevaronlo al Cuzco. Estuvo al principio en el templo del Sol, y después en Casana y otras partes” (Cobo 1956 [1653], vol. XII, cap.XVII: 216; el resaltado es nuestro). Existe otra versión con respecto a que el cuerpo embalsamado de Huaina Capac fue guardado en su propia casa “[…] y luego, los señores meieron su cuerpo en Caxana4, casas del mesmo Guayna Capac” (Betanzos 2010 [1551], vol. II, cap.I: 242; el resaltado es nuestro).8 La palabra casana, entonces, también hacía referencia a un notable ediicio del Cuzco que fue propiedad de un inca paricular y que cuando este murió, albergó su propia momia. Además, el ediicio mismo y sus partes principales fueron considerados como sagrados. Comparando contextos entre arquitectura y tocapu Según lo presentado líneas arriba sobre el diseño arquitectónico de la construcción en Huánuco Pampa y sobre el diseño del tocapu que nos muestran Guaman Poma y Llama la atención que en esta edición del libro de Betanzos aparezca el número 4 al inalizar la palabra caxana (“Caxana4”). 8 380 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus Murúa, es posible airmar que ambos diseños guardan semejanzas formales, pero es importante destacar también sus respecivos contextos. El contexto de la construcción cuatriparita de Huánuco Pampa: - El eje principal del ediicio se orienta hacia la salida del sol en el mes de agosto. - El eje principal del ediicio ija con precisión las fechas cuando el sol pasa por el cenit y el nadir. - Las fechas y orientación del ediicio están asociadas con el inicio de la temporada de siembra en el calendario inca. - La construcción es una sola unidad arquitectónica conformada por cuatro recintos, agrupados en dos pares. Los dos pares están divididos por un corredor central (ver Figura 16). - En el recinto noroeste de la construcción se observa que el orden de la hilada de los muros va de forma conjunta, en forma de espiral, penetrando hacia abajo del nivel del umbral. - Los accesos y el eje de la construcción están orientados hacia una roca alargada y verical que resalta en el paisaje y que posiblemente fue una huaca local importante. - El eje hacia donde se orienta la construcción y la dirección de la salida del sol en agosto se encuentra por encima de la roca alargada en el paisaje. - La orientación de la construcción en el horizonte este se dirige hacia la agrupación de unos cuatro mojones o saywa que sirven de demarcación territorial. - La construcción cuatriparita de Huánuco Pampa forma parte de una capital provincial y administraiva en la zona de Huánuco. - Esta construcción de piedra trabajada de ino acabado se encuentra en el área religiosa relacionada con el sol y con la deidad Viracocha, según algunos estudios (Morris 1987: 34, 42). Esta también es la parte más restringida de Huánuco Pampa. Figura 16 - La construcción cuatriparita de Huánuco Pampa. Reconstrucción 3D realizada por Gerardo Quiroga 2008. 381 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto El contexto del tocapu cuadrangular cuatriparito (casana): - El diseño está presente en las acividades del mes de agosto. - El diseño en uno de los pasajes de Guaman Poma está acompañado por un texto que indica que para el mes de agosto se debía tener mucha precisión al ijar la posición del sol. - El diseño casana está asociado con la temporada de siembra y el inicio del año agrícola. - En las acividades de agosto, en las que está presente el diseño, se muestra a cuatro varones y cuatro mujeres trabajando frente a frente. - Penetrar y abrir la ierra son las acciones masculinas que se retratan en los gráicos de agosto. - En uno de los gráicos de Murúa está presente el diseño en la túnica del inca Capac Yupanqui, quien se encuentra con la mirada orientada hacia una roca alargada, que denomina Pachayachachic, sobre la cual está el astro solar. - El diseño está asociado a acividades rituales, sobre todo con sacriicios a las huacas que se debían hacer en todo el imperio. Estas huacas, en su mayoría, fueron aspectos del paisaje, como rocas, cuevas y mananiales. Las capacocha o sacriicios humanos se hacían también en agosto. - El diseño también está presente en las acciones de amojonar o colocar las saywa sobre los cerros. - Las túnicas con el tocapu casana también las vesían los alguaciles mayores o encargados de poner orden en las provincias, quienes de preferencia eran personajes de la élite inca pero emparentados con la zona de Huánuco. - El tocapu casana aparece principalmente en las túnicas de los incas Mayta Capac y Capac Yupanqui. El primero vivió en el Coricancha, y el segundo, según Murúa, construyó el Quisuarcancha. Como se sabe, el Coricancha fue la casa del dios Sol y el Quisuarcancha fue el templo del dios Viracocha. Ambas construcciones fueron hechas de piedra trabajada y inamente pulida. Este diseño geométrico o tocapu rectangular cuatriparito, graicado por Guaman Poma y Murúa, llama la atención poderosamente por su aspecto formal, pues al igual que la construcción cuatriparita de Huánuco Pampa, está relacionado con fechas y acividades calendáricas equivalentes. Por lo menos eso es lo que se puede inferir tras comparar sus respecivos contextos. Además, se debe agregar que el nombre casana correspondía tanto con un tocapu especíico, como también con una construcción arquitectónica notable del Cusco. 382 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus El viaje del sol en el mes de agosto narrado en un diseño geométrico El diseño plasmado en arquitectura que hemos descrito en el presente arículo, casana, transmite muy claramente un mensaje a través de las direccionalidades a las que apunta y a través de la tridimensionalidad que ofrece la arquitectura. Para empezar a leer el diseño, uno debe tener presente su orientación con relación a la salida del sol en un determinado día, ijado a través de un aspecto notorio del paisaje. Es claro que el diseño está orientado hacia una roca, mediante su corredor central, la que se denomina Chaupijirca de Pishtajhuain. Sus cuadrantes o recintos no solo están orientados hacia los lados este y oeste, sino también hacia una posición especial que se relaciona con una fecha especíica de agosto. El eje que posee el diseño es el eje del cenit-nadir del sol. El diseño, a través de sus espirales en los recintos, señala que hacia el este, a parir del umbral, se asciende en dirección horaria y, después de cruzar el corredor, a parir del umbral del recinto opuesto que posee espiral en sus muros, se desciende hacia adentro. El diseño está plasmado en una construcción con un eje solar, correspondiente según ha sido señalado al eje cenit-nadir, por lo que el diseño no solo se reiere a una abstracción de una fecha ritual calendárica, sino a un fenómeno astronómico real. En otras palabras, el diseño indica que cuando está ajustado el corredor con las posiciones del sol en la salida en su paso por el nadir y la puesta en su paso por el cenit, mediante los espirales de sus muros indica que el sol estará hacia arriba de la construcción o hacia adentro o debajo de ella. Al realizar esta lectura de la arquitectura, el diseño nos narra el viaje del sol en las fechas asociadas con sus orientaciones especíicas. El paso del sol de encima hacia adentro y abajo indica el paso de un ciclo a otro, una transición. Por lo que, para esta lectura, es válido pensar que “los periodos de transición ienen todas las propiedades del umbral, límite entre dos espacios, donde los principios antagónicos se enfrentan o donde el mundo se invierte” (Bourdieu 2009: 356). De esta manera, el diseño plasmado no solamente hace uso de los umbrales para referirse simbólicamente a una trayectoria, sino también el diseño o la construcción es un umbral mismo. Por lo tanto, el diseño y su orientación astronómica permiten ver el uso de conceptos de dualidad aplicados a la observación del cielo, lo cual implica varias oposiciones binarias como arriba/abajo, cielo/ierra, cenit/nadir, el Este como arriba/el Oeste como abajo y, adicionalmente, en esta misma relación con el cielo, pueden describirse oposiciones binarias como ir hacia arriba/ir hacia abajo, abrirse/cerrarse, girar hacia la derecha/girar hacia la izquierda, etc. (Iwaniszewski 2011: 33). Esto permite tener opciones para deinir contextos y proponer interpretaciones o posibles lecturas. 383 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto Esta perspeciva de análisis brinda evidencias favorables, pues está demostrado que en los quipus las dualidades existen dentro del contexto de oposiciones binarias (Urton 2005: 165). Además, es oportuno preguntarnos si los sistemas andinos de dualidades u organizaciones binarias pueden proporcionarnos modelos de oposición y complementariedad que resulten operaivos en una codiicación binaria para el signado de diseños en arquitectura. Preguntas de este ipo se han hecho para otros soportes, como los quipus (Urton 2005: 167). Considero que estas preguntas son válidas, sobre todo si se trata del mismo grupo social, en este caso los incas, la misma organización social andina con sus mismos elementos duales/binarios, quienes con mucha certeza codiicaron sus mensajes de diversos ipos en diversos soportes, como en cuerdas con nudos (quipus), tejidos (tocapu) y arquitectura, tal como se ha planteado en este arículo. Con estas herramientas de análisis, considero que el diseño plasmado en la arquitectura narra la trayectoria del sol en determinadas fechas e indica una transición o cambio de ciclo, lo cual además tenía pariculares signiicados rituales y sociales. Conclusiones La metodología usada para entender la arquitectura inca y los tocapu, empleando la comparación de contextos, nos brinda un carácter más coniable para proponer interpretaciones relacionadas con el signiicado de los diseños, pues al hacer la integración contextualizada de ciertas acividades se está uilizando un enfoque integracional que nos ayuda de forma muy sólida a comprender lo que se pretende comunicar con diseños y/o signos (Harris 1995: 35). De esta manera, con los ejemplos expuestos, podemos coincidir con algunas propuestas que indican que estos diseños geométricos serían “diagramas de relaciones o formulas gráicas que programaban las acividades de la gente en el espacio y iempo, dentro de la organizada estructura del imperio Inca” (Frame 2007: 42). Así, algunos de estos diseños, con alta probabilidad, debieron haber tenido la capacidad de poseer información calendárica para ideniicar algunos eventos o periodos del año dedicados al culto de las divinidades (Eeckhout y Danis 2004: 308, 319). En una escala menor, es posible también que estos diseños o signos, plasmados en texiles o en arquitectura, asumieran un rol importante para transmiir los códigos ideológicos y políicos en las acividades rituales inca, como un modo en el que no se necesitó la comunicación escrita al esilo occidental para transmiir estas ideas (Morris 1995: 423, 431). En una escala mayor, los incas convirieron los paisajes en disposiivos calendáricos ariculados con la arquitectura, sin necesidad de escritura para su transmisión y funcionamiento (Aveni 2002: 257). 384 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus El diseño presentado en la coniguración arquitectónica de Huánuco Pampa, como ya se ha indicado, por una parte releja el concepto andino del yananin, al formarse con sus recintos en pares de perfecta simetría. Esta intención formal de uilizar cuadrados es una intención geométrica que responde a los diseños y coniguraciones que parten del concepto yananin (Plat 1980: 177), de tal manera que las “ideas de cuatriparición, fueron el verdadero principio ordenador de la sociedad Inca, que se manifestó en la organización espacial del Imperio” (González 1998: 39). De acuerdo con los contextos presentados para el diseño cuatriparito en arquitectura y el tocapu casana, estos estarían relejando la idea de orden, un orden a nivel social para relejar en este diseño las idenidades de ciertos personajes y panaca, un orden espacial al ijar la geograía sacralizada para orientar las divisiones espaciales en sí y los límites territoriales, así como también un orden temporal al indicar fechas calendáricas y acividades rituales especíicas. Del mismo modo, este diseño, al estar relacionado con el iempo y el espacio, estaría también relejando las propiedades de la palabra pacha, que es un concepto polisemánico que se reiere tanto a una época o estación, como a la ierra, el mundo o una acividad agrícola, según el contexto en que sea uilizado (Wachtel 1973: 181, Arellano 1998: 474), lo cual alude a un orden cosmológico de las cosas. Deiniivamente, en los texiles, los tocapu sirvieron como un vehículo de comunicación directa, con un gran valor de propaganda. Sin embargo, analizarlos en conjunto con la arquitectura nos permite entender mejor ciertos mensajes que querían mostrar las élites, mensajes de grandeza, poder y riqueza (Stone 2007: 416, Stone-Miller y McEwan 1991: 78), con el in de transmiir su percepción sobre cierto orden. Es posible que las composiciones que se plasmaron en texiles y en arquitectura, efecivamente, relejen la idea de un orden natural y social, que organiza el universo en divisiones de dos mitades, o saya, o en cuatro suyu y que cada mitad y sus partes correspondan a iempos del ciclo anual (Makowski 2010: 64). En otras palabras, el calendario probablemente estaría codiicado con estas coniguraciones. Sin embargo, de acuerdo con el caso observado en Huánuco Pampa, la ventaja de la arquitectura sobre los texiles es que se pudieron plasmar ciertos conceptos abstractos de forma tridimensional. Al comparar la organización del espacio del manto calendárico MFA325 que analizó Gary Urton (2007: 255-257), podemos observar que este manto, gracias al uso de los colores rojo, amarillo y una combinación de los anteriores con el azul-verde (ver Figura 17), presenta una coniguración del espacio de forma bidimensional muy similar al diseño de la construcción cuatriparita de Huánuco Pampa. Esto no quiere 385 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto decir que representen exactamente lo mismo, pero sí se puede percibir un patrón de organización de los espacios, ya sea de forma bidimensional o tridimensional, de acuerdo con lo que permite el soporte material respecivo y los recursos, ya sea con hilos de colores o muros de piedra trabajada. A estos ejemplos podemos agregar uno más en el que se deina una cuatriparición con cuadrantes opuestos y complementarios, pero en soporte de quipu.9 Este es el caso del ejemplar de Pachacamac que también ha sido estudiado por Urton (2003: 32-33, 2005: 9397) (ver Figura 18). Estos probables patrones de organización del espacio sugieren que la plasmación de ideas abstractas podía realizarse sin problemas mediante la arquitectura y los tejidos o “tejiendo” en el paisaje mismo con la arquitectura, lo cual se puede considerar como un lenguaje en sí (Lecoq 2009: 36). Figura 17 - Posición de los colores y esquema del manto calendárico MFA325 (Urton 2010: 255-257). Desde una perspeciva calendárica, las divisiones del iempo en los Andes están directamente relacionadas con las divisiones del espacio, debido a que los ciclos estacionales se encuentran relacionados con las variaciones en la orientación del sol y la Vía Láctea. Por ello, hasta épocas contemporáneas, las percepciones que las poblaciones ienen sobre el cielo son manifestadas en su cultura material en la ierra El quipu de Pachacamac estudiado por Gary Urton procede de la colección del Ethnologisches Museum de Berlín, con código VA 42527. En él, la distribución de los nudos, ya sea en dirección S o Z, divide al quipu en cuatro partes. Así, todos los nudos simples en el cuadrante superior izquierdo del quipu, al igual que los nudos largos y los nudos en forma de ocho del cuadrante inferior derecho, están atados en dirección S. Además, todos los nudos del cuadrante superior derecho, así como los del cuadrante inferior izquierdo, están atados como nudos en Z (Urton 2003: 32-33, 2005: 93-97). 9 386 Sistemas de notación inca: Quipus y Tocapus (Urton 2006: 39, 209). De esta manera, la idea del orden siempre está presente al organizar las acividades y los discursos. Por lo tanto, el diseño cuatriparito de la construcción arquitectónica de Huánuco Pampa y el tocapu casana ideniicado en los dibujos de Guaman Poma y Murúa conformarían la representación de las acividades rituales del mes de agosto, la narración del viaje del sol que va de arriba hacia adentro y viceversa y también el signiicado cosmológico del orden que tenían estas acividades, las cuales tuvieron su abstracción en estos diseños geométricos que la sociedad inca supo plasmarlos y transmiirlos sin problemas y con mucha creaividad. Así, estas evidencias y prácicas revelan el probable esilo de pensamiento que se tenía en el Tawaninsuyu. Este arículo espera ser uno de los hilos que se acerquen a ese pensamiento aniguo de los Andes, con la esperanza de volver a tejerlo de nuevo. Figura 18 - Quipu cuatriparito de Pachacamac, según Urton (2003: 32-33; 2005: 93-97). Agradecimientos Por su apoyo, acceso a la bibliograía, críicas y comentarios queremos agradecer a las siguientes personas: Hernán Ramos, Manuel Perales, Adam Stack, Martha Bell, Dawn Denoncourt, Lucía Watson, Sergio Barraza, Luis Enrique Paredes, Wendy Moreano, Carlo Ordoñez, Thibault Saintenoy, Patrice Lecoq, José Valverde, Marco 387 El tocapu que narra el viaje del sol en el mes de agosto Tiburcio, Leonardo Tiburcio, Ramiro Matos, Carmen Arellano, Gary Urton, Jean Pierre Protzen, Craig Morris (†), Mariuz Ziółkowski, Krzysztof Makowski, Tristan Plat, Marco Curatola, Idilio Sanillana, Paola González, Johanna Broda, Tom Zuidema y Norma Matos. También queremos agradecer a Gerardo Quiroga, por su coninuo apoyo y por los dibujos en 3D, y a la Comunidad Campesina de Aguamiro, por su apoyo en las invesigaciones. Bibliograía Anders, Martha B. 1993 “Coniguración calendárica y cosmológica de un siio Huari del Horizonte Medio”. Boleín de Lima, 89: 49-74. 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