Certificación orgánica para bananos

Debido a los requerimientos de la producción orgánica en términos de calidad del suelo, manejo del agua, mitigación del cambio climático y conservación de la biodiversidad, el suministro de banano orgánico es naturalmente limitado. Sin embargo, la demanda y la producción han ido creciendo en los últimos años, lo que se ha traducido en un aumento del 18% de la superficie cultivada de banano orgánico entre 2008 y 20151.

En el 2013, la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (IFOAM) estimó que la producción de banano orgánico representó 850 000 toneladas métricas, casi el 1% de la superficie mundial de producción de banano. En el 2015, los países que producían la mayoría de los bananos orgánicos eran la República Dominicana (12 000 ha), Ecuador (11 500 ha), Filipinas (6 500 ha), Perú (5 500 ha) y Costa Rica (4 500 ha). Las ventas de banano orgánico siguen creciendo en todo el mundo, lo que representa una oportunidad para los productores certificados. La certificación orgánica de bananos implica asegurar el cumplimiento de un conjunto acreditado de normas, como se describe a continuación.

  • La certificación es el procedimiento por el cual un organismo de certificación independiente proporciona una garantía escrita o equivalente de que un proceso o producto cumple con los requisitos de una norma específica.
  • El organismo de certificación es un tercero que no tiene interés en la relación económica entre el proveedor y el comprador2.
  • El proceso de certificación está basado en una serie de actividades de inspección que pueden incluir la inspección continua en línea, la auditoría de sistemas de garantía de calidad y la evaluación de procesos y/o productos terminados.
  • La acreditación es el procedimiento mediante el cual un organismo autorizado evalúa y otorga el reconocimiento formal de que un programa de certificación está acorde con las normas del organismo autorizado.

Las normas orgánicas pueden ser desarrolladas por:

  • Organizaciones privadas. La primera certificación orgánica voluntaria fue desarrollada en 1946 por la Soil Association en el Reino Unido. Las asociaciones privadas en los Estados Unidos empezaron a certificar productores orgánicos en la década de 1970. En el 2014, había más de 120 estándares orgánicos privados. Las normas privadas, ya sean locales o internacionales, son voluntarias e incluyen sistemas de garantía participativa. Los organismos de certificación reconocidos en el sector bananero incluyen BCS, Control Union, Ecocert, Bureau Veritas, SGS, entre otros.
  • Gobiernos. En el 2014, 110 países tenían una regulación orgánica: 69 completamente implementada; 19 reglamentos finalizados pero aún no implementados plenamente y 12 países en el proceso de redacción de la legislación. Todos los productos orgánicos que se producen o importan en estos países deben cumplir con la norma orgánica nacional de etiquetado como tal. Las normas orgánicas nacionales se basan principalmente en las directrices del Codex Alimentarius e IFOAM como normas mínimas.

Normas orgánicas nacionales en los países importadores

Europa, América del Norte y Japón representan el 99% de las importaciones de banano orgánico. Para vender bananos orgánicos en los principales países importadores, los productores deben cumplir con los estándares orgánicos locales.

  • Unión Europea: La norma orgánica europea define los principios y objetivos de la producción orgánica y las normas para los productos orgánicos etiquetados.
  • Japón: La Norma Agrícola Japonesa (JAS) fue creada en el 2001.
  • Estados Unidos: Siguiendo la Ley de Producción de Alimentos Orgánicos de 1990, se creó en el 2000 el Programa Nacional Orgánico de Estados Unidos (NOP)

Existen acuerdos específicos de equivalencia sobre normas de producción orgánica entre algunos países, que permiten el comercio de productos incluso cuando la norma aplicada no se ajusta al organismo certificador del otro país. Por ejemplo, los Estados Unidos han firmado acuerdos con Canadá, la Unión Europea, Japón y Taiwán. Esto permite que un producto que fue producido y certificado orgánico en los Estados Unidos sea comercializado en Japón con la misma etiqueta, evitando los costos de solicitar otro certificado.

Proceso de certificación

1. Adopción de prácticas orgánicas

La organización o finca adopta prácticas de producción orgánica. Para obtener la certificación orgánica, el período de conversión requiere la prueba de la calidad del suelo y un plan de rotación para rehabilitar los recursos durante 2-3 años. Las sustancias prohibidas no deben haber sido utilizadas en las áreas de producción durante los últimos tres años consecutivos.

2. Selección de la autoridad de certificación

La organización o finca debe seleccionar una autoridad de certificación e iniciar el proceso de certificación orgánica pagando la tarifa correspondiente.

3. Revisión de documentos

La autoridad de certificación revisa la documentación de la organización o de la finca para verificar que cumple con los requisitos de la norma.

4. Auditoría

Posteriormente, un auditor lleva a cabo una inspección in situ.

5. Realización del informe de inspección

Se prepara un informe de la inspección y, en caso de incumplimiento, se efectúan correcciones y las pruebas compartidas con la autoridad de certificación.

6. Verificación

Una vez que se verifique que el solicitante cumple con la norma, el certificado puede ser emitido y el producto puede ser etiquetado como orgánico.

7. Renovación

Cada año, la empresa auditora repite el proceso de verificación y validación del certificado3.

El sello orgánico del producto lleva el nombre del organismo de certificación y las normas con las que cumple. En el caso de una plantación bananera convencional, para poder comercializar bananos con el sello orgánico, la plantación debe cumplir con un período de transición de tres años:

  • Durante los primeros 12 meses del período de conversión, el producto no puede comercializarse como un producto orgánico.
  • Después de 12 meses, se puede indicar en la etiqueta del producto que se ha producido en un proceso de conversión a orgánico4. Sin embargo, la mayoría de los mercados importadores no reconocen esta práctica.
  • A partir de la inspección en el cuarto año, se emitirá un certificado certificando la producción orgánica y el producto puede ser comercializado como tal.

Beneficios para la finca y
el productor5

  • Mejora de la condición del suelo.
  • Protección de los recursos naturales.
  • Reducción de la contaminación de las fuentes de agua y de la huella de carbono (aunque el transporte sigue siendo el tema más central)
  • Protección de la biodiversidad (agrobiodiversidad y silvestre) y bienestar animal.
  • Protección de la salud humana.
  • Trazabilidad mejorada.
  • Mayor acceso a los mercados locales, regionales e internacionales.
  • Apoyo a las economías locales y potencial para el desarrollo rural.
  • Acceso a financiamiento adicional y programas de asistencia técnica6.
  • Facilitación del comercio, permitiendo a los agricultores vender, etiquetar y presentar los productos como orgánicos.
  • Mejor reconocimiento del consumidor.
  • La certificación de grupo abre potencial para la cooperación y el desarrollo rural.
  • Aunque la certificación orgánica no garantiza un precio mínimo establecido por el programa de certificación, el mercado ha determinado históricamente una mayor rentabilidad para los bananos orgánicos sobre los que no están certificados como orgánicos.
  • El precio más alto de los bananos orgánicos también ha demostrado ser más estable que el precio de los bananos convencionales7.

Desafíos

  • Dificultad para cumplir con los requisitos de calidad de la norma.
  • Gama limitada de insumos agrícolas para controlar plagas y enfermedades (especialmente ya que la Sigatoka Negra se encuentra en la mayoría de los países productores de banano orgánico).
  • Costos de certificación asociados con el monitoreo interno del proceso de producción.
  • Costo y dificultad para convertir plantaciones industriales.
  • Desafío de la adaptación regional y armonización de normas para construir equivalencias y cooperación.