<<Te han enseñado en la vida diferenciar de buenos y malos. Si esto lo hacen otras personas, no pasaría nada>>: esta es una de las frases con las que el profesor, personaje principal de La casa de papel, expone la tesis principal de la serie española que exhibe Netflix: el bien y el mal es un problema de conciencia y lo que uno paga por delinquir, o la valoración social de determinada falta, está supeditado a la posición de poder que ocupa el sujeto dentro de la sociedad. Podemos hacernos la pregunta sobre la diferencia entre lo bueno y lo malo, sobre todo cuando hemos adherido a un modelo que se sustenta en la desigualdad, que nos deshumaniza.
El argumento de la serie a groso modo va así: un grupo de delincuentes profesionales son convocados por el profesor --interpretado por Álvaro Morté--a ser parte...