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Deuda de municipios registra seis años con disminuciones
La tendencia descendente obedece principalmente a que en el 2016 se creó la Ley de Disciplina Financiera, cuyo objetivo es evitar que los gobiernos subnacionales cometan prácticas que generen presiones en sus finanzas por financiamientos sin control.
Pese a la pandemia y la vulnerabilidad económica que ha presionado las finanzas públicas locales, en el 2022 la deuda municipal siguió presentando una tendencia a la baja, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Al cierre del año pasado, el saldo de la deuda municipal ascendió a 37,701 millones de pesos, una caída anual de 5.7% en términos reales, ligando con este resultado seis años con disminuciones.
Es decir, el ciclo de descensos comenzó en el 2017, cuando el saldo de la deuda total municipal concluyó en 45,183.5 millones de pesos, monto que representó una baja real de 20.4% con respecto al mismo periodo del año previo (53,502.9 millones). Para el 2018 la caída fue de 10.5%, en el 2019 de 5.9%, en el 2020 de 4.8% y en el 2021 de 13.9 por ciento.
El académico del departamento de Contabilidad y Finanzas del Tecnológico de Monterrey Campus Estado de México, Héctor Magaña, detalló que este comportamiento obedece principalmente a que en el 2016 se creó la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios (LDFEFM).
El objetivo, ahondó, es que con la implementación de una serie de marcos regulatorios se evite que los subnacionales se endeuden y cometan prácticas que generen presiones en sus finanzas por financiamientos sin control.
La LDFEFM obliga a los gobiernos municipales a tener un manejo más cuidadoso en cuanto a la emisión de deuda, ya que se debe comprobar que los financiamientos están orientados hacia proyectos productivos”, aseguró.
El especialista comentó que hay un factor adicional que los subnacionales están contemplando y que tiene que ver con que los municipios han identificado que las tasas de interés han incrementado, por lo que ya no están acudiendo con los acreedores tipo banca de desarrollo y la banca múltiple.
“El incremento en las tasas de interés de referencia, como resultado de una política monetaria más restrictiva por parte del Banco de México y como medida de combate a la inflación, ha provocado que los costos de financiamiento sean más elevados”, añadió.
“Esto también aplica a los municipios que emiten más deuda, ya que deberán pagar intereses más elevados en contraste con lo observado durante la década pasada. De esta forma, para mantener su endeudamiento en niveles manejables, son pocos los municipios que incrementan sus financiamientos”, expuso.
En la línea de evitar mayores endeudamientos, hubo un total de 36 municipios que en el 2022 lograron finiquitar sus financiamientos; por ejemplo, Parras en Coahuila, Chilpancingo de los Bravo en Guerrero, Guanajuato en Guanajuato y Progreso en Yucatán.
Comportamiento
Según datos de la SHCP, los gobiernos municipales más endeudados del país son: Tijuana en Baja California, con un monto de 2,344 millones de pesos; Hermosillo en Sonora, con 1,774 millones; Monterrey en Nuevo León, con 1,626 millones, y en Jalisco están Guadalajara con 1,278 millones y Zapopan con 1,063 millones.
Por entidad federativa, los municipios de Jalisco en conjunto concentraron el mayor monto de deuda municipal de los 37,701 millones de pesos del 2022, con 5,440 millones, seguido de los ayuntamientos del Estado de México, con 4,981 millones y Sonora con 4,338 millones.
De los 25 ayuntamientos más endeudados en el 2022 y que abarcan 53.3% del total de la deuda pública municipal, solamente tres incrementaron sus financiamientos: Los Cabos en Baja California Sur, con un crecimiento real anual de 52.4%, seguido de dos municipios del territorio mexiquense: Naucalpan de Juárez con 9.7% y Atizapán de Zaragoza con 1.3 por ciento.
Mientras considerando todos los municipios del país registrados en la SHCP, sobresale el caso de Chiapa de Corzo en Chiapas, ya que presentó la mayor variación anual real de su deuda, de 3,621%, es decir, pasó de 1.2 millones de pesos en el 2021 a 49 millones en el 2022.
